miércoles, 23 de junio de 2010

ENTRE EL EXILIO POLÍTICO Y EL ECONÓMICO

El exilio es el estado de estar lejos de la propia tierra (ya sea ciudad o nación) y puede definirse como la expatriación, voluntaria o forzada, de un individuo. Algunos autores utilizan el termino "exiliado" con el sentido de "refugiado". Quise comenzar con la definición de esta palabra para que puedan comprender la razón de lo que a continuación escribiré, aún a sabiendas de que muchos lo saben. Desde los tiempos más remotos ha existido el exilio de personas, y mayoría de las veces se produce por estas dos grandes razones: lo político y lo económico. Con el exilio político, el individuo, intentan tener la libertad de pensamiento que en su tierra le es negada donde es perseguido por tener ideologías “diferentes”, torturados y hasta matados. En la “nueva tierra” se busca encontrar todo lo perdido y se anida la esperanza de volver cuando esa “libertad” robada sea devuelta.

Con el exilio económico la persona intenta encontrar los medios para solo subsistir ya que en su país, también, es le es negado. Este estado obliga al exiliado a desarrollar actividades para el que no está preparado, ya sea por falta de capacitación o bien por tener una que nada tiene que ver con el trabajo a realizar. Lo que lleva a al mismo a sentir frustración, sumado al desarraigo, provocando un estado de ánimo difícil de expresar y describir. Más si a dejando en su país de origen familia, amigos…olores, colores.

Los dos exilios son situaciones en donde impera el miedo a lo desconocido, el no saber a que se va a enfrentar. Pero a la vez abriga la esperanza. Eso que ninguna persona debería perder, tanto los “recién llegados” como quienes son capases de “recibir” a estos en tiempos tan frágiles.

Quizás no este “descubriendo” nada pero espero provocar, al menos, de forma conciente o inconciente que recuerden que exilio es igual a inmigración.

Mali