Olla Exprees

En este mes de Mayo, Argentina conmemora una años más de la constitución de su primer Gobierno Patrio, y por ello voy a hacer un pequeño homenaje contando cómo se festeja dicha fecha (25 de Mayo) en algunos lugares… y más concretamente en un poblado llamado “Colonia Suiza” a pocos kilómetros de San Carlos de Bariloche, lugar que he hecho mención en una nota anterior.
Para llegar allí hay que ir por la carretera 237 de camino al Hotel Llao LLao y en el kilometro 18 girar a la izquierda; debo comentar que nuestros sentidos se llenarán de placer al contemplar la belleza de la naturaleza a nuestro alrededor ya que nos encontraremos con la flora autóctona como alerces, arrayanes, cipreses, coihues, amancay, arevejillas, notros, mutisias y un sinfín más… el camino rodea el majestuoso Lago Nahuel Huapi y luego el Lago Perito Moreno. Cuando llegamos al poblado nos encontramos con “La Casa Grande” de Félix Goye (construcción que data del año 1895), colonos provenientes del Cantón de Valais, Suiza Francesa. Los festejos se realizan en el patio de la escuelita, hay baile tradicional y cantores del lugar, pero además se realiza un CURANTO, comida tradicional indígena.
El Curanto, en lengua mapuche significa: cura, piedra y tum, cocer. Consiste en cocer los alimentos al calor de las piedras (bochas), colocadas en un pozo cavado en la tierra. Las piedras son calentadas previamente con leños hasta quedar al rojo vivo. Después se colocan hojas de maqui o nalca (planta con un grueso rizoma y hojas de hasta un metro de diámetro), encima van las verduras como patatas, batatas, zapallo (ahuecado relleno con queso, crema y arvejas), etc. Y las carnes de vaca, de cerdo, de cordero, pollo, chorizos. Se vuelve a cubrir con hojas, lienzo húmedo y se tapa el pozo con tierra. La cocción demora unas 2 o 3 horas. Cuando está, se quita toda la tierra, el lienzo y las hojas con mucho cuidado. Es como una “Olla Express”, el vapor sale de la misma manera. Una vez descubierto, podemos sentarnos a la mesa y saborear este exquisito manjar con una copa de vino de la zona.
Los distintos espectáculos continúan dando color al festejo del 25, los niños de la comarca participan activamente, arengados por padres y maestros. Cantan, bailan y dicen poesías ensayados durante los últimos días. Vienen los aplausos…..Como colofón final se sirve el acostumbrado vaso de chocolate.
Las patrias existen y las tradiciones nacionales también…solo es necesario adecuarlas a los tiempos que corren sin perder la vista en el pasado, haciendo especial hincapié en la libertad, el progreso y la justicia, que fue el grito de la revolución del 25 de mayo de 1810.